domingo, 25 de junio de 2023

FILOCAFÉ: ¿ESTAMOS PREPARADOS PARA LA DEPENDENCIA QUE SUPONE LA VEJEZ?

Este martes 27 de junio, tercer café filosófico. En el del pasado 20, además de las preguntas no elegidas en el anterior, se propusieron las siguientes:

  • ¿Son los políticos actuales capaces de dirigir la sociedad o nos llevan irremediablemente hacia el abismo?
  • ¿Está en desuso la masculinidad?
  • ¿Estamos preparados para la dependencia que supone la vejez?
Se eligió esta última y, hoy, en lugar de comentarlo yo, he pedido a algunos participantes que lo hicieran y aquí tenéis los comentarios de dos de ellos, Manu y Josetxo. ¡Mil gracias a los dos!

Josetxo: En lo referente a la conducción del debate, cuesta hacerse un hueco, porque el moderador Pello, emplea finamente el método socrático de la mayéutica, magistralmente, para que el interlocutor descubra sus propias verdades, o sea, una forma de construir conocimiento a partir de resolver preguntas y una forma de analizar la verdad comparando diferentes opiniones. Resumiendo: método positivo, el único aspecto negativo que encuentro a las sesiones es su corta duración. Gracias, Pello, por tu maestría y sabiduría. (Josetxo)

Manu: Me gustó cómo se desarrolló el café porque, a la hora de compartir, tan importante es la claridad y concreción en lo que queremos decir, como el saber controlar la emoción de querer expresar lo que pensamos y sentimos a veces, queriendo saltarnos a la persona que tenemos al lado. En definitiva, me gusta la forma de llevar el café por la oportunidad de escucha activa que se ofrece. Lo único "negativo" es el inexorable paso del tiempo porque siempre se me quedan cortos. Me llamó la atención la contradicción en alguna de las ideas. Por ejemplo, decimos que no estamos preparados para la dependencia como sociedad porque no escuchamos a los mayores y los excluimos, pero sin tener toda la información necesaria, se dice que un Presidente de un país, está senil y no debería estar ahí en dicho puesto. Otra contradicción: que deberíamos ver la vejez como un exitazo, pero una vez llegada a ésta, nos autoexcluimos, más que nos excluye la sociedad. Paradoja: hablamos de si estamos preparados para la dependencia que va a suponer la vejez, haciendo una distinción en si lo estamos a nivel individual para aceptarlo, y si lo estamos como sociedad para ofrecer cobertura a esa dependencia, cuando en mi opinión si no estamos preparados para lo primero, difícilmente vamos a dar respuesta a lo segundo. Porque nadie desea hacer llevar una vida de vejez a una persona joven. Cariño sí, amor por supuesto, comprensión, sin duda, para nuestros mayores, pero que, llegado el momento, la cuerda de la dependencia con nuestros familiares (hijos, por ejemplo) no se haga tan corta que les hagamos vivir una vejez anticipada. La hoja del cerezo no puede ni debe brotar en invierno. Y admiro a los elefantes cómo aceptan que ya no son útiles para la manada y se retiran aceptando ese final. (Manu)

Manu: He encontrado una idea valiosa: las ganas que en el fondo tiene la gente de compartir y saber sobre temas profundos que tal vez en sus entornos no llegan a tener cobertura emocional. Me llamó la atención el hecho de que la muerte, de forma maquillada, indirecta, siempre ronda en muchas de las cuestiones planteadas. Quiero decir que, hablando de dependencia, salió la palabra muerte. Me gustó mucho la idea de ver la vejez como un "exitazo" que expuso uno de los participantes. Aunque se comentó la idea de diferenciar la dependencia física y mental, en este punto creo que el que lo expuso quería hacer ver, no tanto si la dependencia viene de una incapacidad física o incapacidad mental (neurológica, digamos), sino, si mentalmente estamos preparados para llegar a una vejez que, irremediablemente, en la inmensa mayoría de los casos traerá consigo una dependencia de los demás. Saqué la conclusión de que hay temas sobre los que el ser humano no se puede engañar ni puede escapar de ellos poniendo corazas, y este es uno de ellos. El irremediable transcurso del tiempo que nos llevará, si hay suerte, a una vejez que no es más que una etapa de esta enfermedad crónica con la que nacemos, que se llama muerte. (Manu)

Josetxo: Partiendo de la pregunta se abrieron diferentes frentes, aunque los puntos de vista no se alejaban unos de otros. La gente más joven comprendía correctamente la pregunta, pero desde ese punto de vista la veían lejana en el tiempo, mientras que los más mayores la asimilábamos con ciertas dudas, aunque la realidad es la que es. El grupo, en general, tenía dudas sobre cómo iba a ser esa transición, pero lo que estaba claro para los allí presentes, era el destino final. Si bien es cierto, las dudas existenciales que se palpaban en el ambiente quizás sean debidas a que, desde niños, no se nos enseña a lo que en otras religiones tienen establecido como una cultura de comprensión de la muerte, haciendo que esta última sea un paso de transición. Por lo general las posturas han sido valiosas, dado que cada uno aporta lo que en ese momento cree que es lo correcto. Por comprimir, muchas ideas quedan fuera del debate, la conclusión personal es que todos guardamos esa incertidumbre hacia e mañana. (Josetxo).

Y tú, ¿estás preparado para para la dependencia que supone la vejez?

Si te apetece pensar y conversar en grupo con libertad y de manera crítica, este martes 27, estaremos en la Casa de Cultura de Zumarraga.


lunes, 19 de junio de 2023

FILOCAFÉ, RELIGIÓN: ¿AUTOENGAÑO?

Este martes 20 de junio llevaremos a cabo el segundo filocafé. Las preguntas propuestas la semana pasada fueron:

  • ¿Existe una ética universal?
  • ¿Es necesaria más filosofía dentro de la educación actual?
  • ¿Qué voy a hacer yo ahora?
  • Religión: ¿autoengaño?

Salió elegida esta última. He aquí algunas observaciones sobre cómo se desarrolló:

La religión recibió distintos enfoques:

  • Como un conjunto de creencias que responden a la necesidad de dotar de sentido a la existencia, de aliviar el miedo al vacío, a la muerte y a la pérdida irremisible de nuestra identidad. En este sentido, la religión sería un autoengaño (una mentira que nos contamos para soportar mejor la vida y la muerte) o no lo sería, pues, para quien cree, la religión es una experiencia íntima y personal según la cual su creencia es verdadera y se relaciona con algo real.
  • En la misma línea, la religión como una forma de sostener a la persona, de ayudarla dotándole de esperanza y resignación, aunque el precio a pagar sería el de la libertad, pues la religión te quitaría libertad de pensar.
  • Como un instrumento de poder de las élites, que han encontrado en la religión una forma de dominio y de legitimar su poder. Aquí sería no un autoengaño, sino un engaño construido para dominar.
  • Como una forma de relacionarnos con los sagrado, con lo inexplicable.
  • Como una forma de organizar y cohesionar la sociedad y que ha ayudado a la supervivencia de las sociedades.
  • Como un fenómeno humano inherente a nuestra naturaleza, incluso a la posibilidad de que la religión estuviera inscrita en nuestro cerebro.
  • Como una manera de establecer una ética, unas normas de convivencia, cuestión relacionada con otras de las preguntas planteadas, si existe una ética universal.

Por último, comento algunas actitudes, algunas de las cuales fueron comentadas allí mismo:

  • Echar mano de la "enciclopedia" (conocimientos adquiridos) y poca aportación personal. Los conocimientos son necesarios, pero la filosofía es la elaboración de una visión personal de las cosas a partir de los conocimientos adquiridos, visión personal que no puede ser sustituida por lo que he estudiado, he leído... Por eso, siempre es adecuado recordar la consigna kantiana: Sapere aude! Atrévete a pensar por ti mismo!
  • La ansiedad por defender una postura que elimine a otra considerada contraria, lo cual tiene, entre otras, dos consecuencias negativas: impide la escucha activa, pues en lugar de escuchar y comprender la perspectiva desde la que razona la otra persona y entrar en ella, ocupamos el tiempo en pensar cómo combatirla encerrándonos en nuestra perspectiva. La segunda es que me impide tener en cuenta la riqueza, diversidad y complejidad de la experiencia humana que se manifiesta, precisamente, en la riqueza, diversidad y complejidad de las filosofías que han surgido a lo largo de la historia.

Si te apetece, este martes 20 de junio seguiremos pensando en grupo, en libertad y de manera crítica. Será a las 18:30 en la Casa de Cultura de Zumarraga. 




domingo, 11 de junio de 2023

FILOCAFÉS DE VERANO EN ZUMARRAGA

Uno de los cafés filosóficos de año pasado
Un filocafé o café filosófico es un espacio público para pensar y dialogar de manera crítica.

El encuentro suele comenzar con la elección, por votación, de una pregunta o tema propuesto por los participantes. A partir de ese momento, las personas que quieran hablar piden la palabra y se abren los turnos de intervención. Al ser un lugar para pensar y dialogar de manera crítica, se cuida, por ejemplo, si lo que alguien dice es claro y es comprendido por los demás, qué relación guarda lo dicho con el tema o pregunta elegida, si una idea está argumentada o no, cómo se puede defender la idea contraria... así como las actitudes que van surgiendo a lo largo de la sesión. Aunque pueda ocurrir, el objetivo no es convencer a nadie, sino ver la posibilidad de enfocar un problema desde distintas perspectivas con cierto rigor.

La entrada es libre y puede asistir cualquier persona, pues no hace falta tener conocimientos filosóficos, solo cierta inquietud por pensar y compartir ideas con otras personas.

Serán los martes 13, 20, y 27 de junio y 4, 11 y 18 de julio a las 18:30 en la Casa de Cultura de Zumarraga.