Efectivamente, nadie elige las cartas que le han tocado en la partida diaria de la vida (lugar de nacimiento, padres, temperamento, sociedad, creencias, acontecimientos, acciones de los demás...) pero sí podemos elegir cómo responder a todo eso que no elegimos, aumentando progresivamente la eficacia y congruencia con nuestros valores: esta es la esencia de la respons(h)abilidad.
Os dejo con las últimas aportaciones de los alumnos del curso de Excelencia Personal sobre este tema. Os doy las gracias por vuestras estupendas colaboraciones.
Si siento que me pongo a cien... ¿qué voy a hacer al respecto?
Si siento menosprecio hacia mí... ¿qué voy a hacer al respecto?
Si siento que provoco miedo... ¿qué voy a hacer al respecto?
¿Qué voy a hacer al respecto ahora, sabiendo que existen otras opciones,
sabiendo distinguir entre respuestas reactivas y proactivas?
Pues, a mi entender, lo siguiente: Estar atento a mis reacciones, identificar las dificultades a superar,
planificar cómo superarlas, perdonarme los fracasos y seguir en la
brecha.
Es decir: ¡ser responsable de lo que está en mi mano!
¿Qué, si no?
MIKEL ARRANZ
1.
¿Qué es lo más importante que he aprendido? Que hay que ocuparse más y preocuparse menos.
Tratar de buscar soluciones en lugar de culpables.
2. ¿Qué
he descubierto que no sabía? Que la mayoría de las veces gastamos
nuestra energía en cuestiones cuya solución no está en
nuestra mano.
3. ¿Qué
ideas o creencias me he cuestionado? Aquellas relacionadas con la responsabilidad =
culpabilidad y con el derecho a poder elegir, equivocarte...
4.
¿He comprendido el beneficio de la proactividad y la responsabilidad? Sí,
aunque considero que es muy trabajoso ser responsable y, a la vez, saber
tomar la iniciativa para que ocurra aquello que tú quieres que
ocurra.
5. ¿Cómo
puedo utilizar lo aprendido para mejorar? Ocupándome de aquello en lo que yo puedo
influir, decidir de alguna manera, sin tener que esperar la aprobación de
los demás.
6. ¿He
tenido ya alguna experiencia en la que poner en práctica lo aprendido? Sí, aunque me cuesta mucho ser proactiva.
7. ¿En qué voy a cambiar mi conducta a partir de ahora? Intentar aceptar aquello en lo que no
puedo influir y ocuparme en buscar soluciones y preocuparme
menos.
CARMEN PÉREZ
Me he dado cuenta en esta semana que el papel de víctima y actuar de forma
reactiva se me da muy bien. Tengo la cabeza en tantos sitios que cuando
se me presenta una situación difícil, no me paro a pensar y actuo de forma
precipitada. En adelante tengo que "aprender " a actuar de forma
proactiva anticipándome a los problemas, buscando nuevas soluciones, tomando
mis propias decisiones para así lograr mis objetivos. Lo más fácil es resolver
el problema cuando se presenta, sin el mínimo esfuerzo, sin pararte a
pensar en posibles soluciones.
ANA ESTRELLA